Hasta los adultos mayores tienen que trabajar para subsistir sobre todo en actividades no calificadas durante la contingencia por COVID-19.
Pese al gran esfuerzo que realizan, la remuneración es poca. Sin embargo, no tienen otra alternativa.
Este es el caso de Víctor López Castillo, de 86 años, quien tiene que sobrevivir mediante a recoja de desechos sólidos, porque carece de apoyos gubernamentales.
Después de las 15:00 horas, cuando el sol aun es intenso, sale a recoger desechos sólidos para vender en las recicladoras.
Levanta desde cartones hasta metales. El esfuerzo es mucho y a veces pese al esfuerzo no gana siquiera un salario mínimo al día.
Y es que esa labor representa riesgos para su salud porque tiene que estar en contacto con desechos en descomposición.
En lo que va de la contingencia solamente ha recibido una pequeña despensa que se agotó en tres días, relató.
Para obtener recursos ha puesto a la venta unos terrenos. Su número es el 983 15 5 64 55 para los interesados o quien desee apoyar.
Vive en la calle Manuel Crecencio Rejón, Lote 11, entre Constituyentes y Corozal, de la Colonia Comité Proterritorio de Chetumal.
Cabe mencionar que como el, hay muchísima gente que por la pandemia dejo de laborar como cerillitos o empaca despensas en los supermercados y ante ese dinero que recibían y hoy ya no, hoy muchos son tratados muy mal por sus parientes que los tienen como arrumbados en sus propias casas
