Por temor a asaltos y riesgo a su integridad, los proveedores de insumos han dejado de llegar a ciertas comunidades de la Ribera del Río Hondo en la última semana.
Establecimientos y familias de esta zona ya sufren desabasto de algunos productos, entre ellos agua potable y perecederos.
La semana pasada ocurrieron dos robos violentos en la carretera José Narciso Rovirosa-La Unión.
Dos empleados de conocida refresquera fueron privados de su libertad y abandonados en una brecha cerca de la comunidad de Esteban B. Calderón, por presuntos delincuentes que antes de huir con el camión, del cual descargaron todo el producto por poder abrir “la caja fuerte”, dispararon al suelo cerca de sus cabezas.
Asimismo, dos trabajadores que se resistieron a un asalto cerca de la comunidad de Francisco Rovirosa, fueron baleados por motociclistas que les despojaron de la camioneta en la cual viajaban y casi 100 mil pesos.
Uno de ellos recibió tres balazos, uno cerca de la cabeza que aun le mantiene grave en conocido hospital de Chetumal, en tanto que su copiloto fue herido en el lado derecho del tórax y evoluciona favorablemente.
Habitantes de la Zona Limítrofe y La Unión, como S. C. P. y A. T. G. señalaron que desde hace más de una semana el ingreso de proveedores de insumos ya no es regular.
El temor a asaltos y riesgo a su integridad, sumados a la falta de presencia policíaca le han ocasionado.
En la Ribera del Río Hondo hay desabasto de ciertos productos, como agua purificada, pan y perecederos, en las comunidades de José Narciso Rovirosa, Francisco Botes, Esteban B. Calderón, Nuevo Revolución y La Unión.
Lo mismo ocurre en las alcaldías de Dos Aguadas y Cerro de las Flores, y comunidades aledañas, en la Zona Limítrofe con Campeche.
Quienes tienen posibilidades salen a adquirirles a otras poblaciones, sin embargo, las familias que no, que son la mayoría, ya sufren las consecuencias.
La petición es mayor presencia policíaca para que los proveedores retornen a tales comunidades.
